Mi vida con el cáncer cambio desde que me dijeron los resultados de mis exámenes, me dije “tengo que ser fuerte y enfrentar esto, ser positiva, esto no me la va a ganar”.
Al pensar en un antes sin cáncer libre y ahora todo es distinto, es más difícil, porque tengo que estar más preocupada por mi salud, remedios, controles y exámenes sin faltar a ellos.
Lo más difícil fue tomar la decisión de la operación de la mama, porque mi cuerpo estaba completo y lindo, pero había que decidir entre vivir o morir de cáncer. Por lo tanto, decidí operarme, ya que hay que defender la vida y no la hermosura de un cuerpo.
La hermana de una compañera de trabajo, me invitó a la Fundación, porque me iba a hacer muy bien y ha sido una experiencia muy linda, ya que me sentí muy acompañada; había un calor humano que me acercó más, el poder dialogar y compartir opiniones, me hizo sentirme apoyada.
Para los pacientes con cáncer es importante contar con este acompañamiento en nuestra comuna, a través de psicólogos, terapeuta de kinesiología, talleres manuales, etc.
Cabe destacar que Vi-Da ha estado con cada uno de sus pacientes, atendiendo sus necesidades de tratamiento y solicitando horas para sus controles; para todos ellos mis agradecimientos, en especial a Sarita, quien nos escucha y se preocupa por todos.
#FundacionViDaMeAcompaña